Este artículo es patrocinado por Samsung.El cántico para los Raiders y los chiflidos para los Texans abrumaba la cancha del Estadio Azteca. Por primera vez en la historia, la NFL tuvo un partido de lunes por la noche fuera de los Estados Unidos y no defraudó. Más de 76 mil aficionados se alborotaron en la Ciudad de México para presenciar un partido entre líderes divisionales y haciendo segunda casa para la revelación de la temporada, los Raiders de Oakland. Houston anotaba y defendía como siempre. El marcador de 10-10 al descanso de medio tiempo se volvió una ventaja para Houston cuando reanudó el partido, pero Oakland remontó para la fiesta mexicana del Raider Nation.
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