FYI.

This story is over 5 years old.

Μodă

La joven emprendedora que teje belleza con moda y tecnología

Madison Maxey diseña e ingenia prendas para un futuro cercano.

Esta es la tercera entrega de una serie de perfiles de artistas de nuestra nueva serie 'Trailblazers', presentada por Adidas, donde unimos a dos jóvenes creativos al inicio de sus carreras, explorando sus procesos. Checa el trailer de nuestro episodio de Nueva York a continuación.

Imagen cortesía de Madion Maxey

Desde una chamarra con control de temperatura hasta un monitor de electrocardiogramas portátil, Madison Maxey trae conceptos de moda de alta tecnología al mainstream. La emprendedora de 22 años se llama a sí misma una "tecnóloga creativa", un término muy afín dado su historial profesional. La entusiasta de la moda visualiza una industria de las prendas que depende tanto de las nuevas tecnologías de una forma que sucede con métodos tradicionales.

Publicidad

En 2013, se convirtió en la primera diseñadora de modas en ganar la prestigiosa Thiel Fellowship, un incentivo de $100,000 dólares iniciado por el fundador de Paypal, Peter Thiel, para graduados de preparatoria que desean evitar el paso por la universidad y lanzar un negocio. Maxey aplicó para recibir esta beca después de haber tomado un año sabático de sus estudios de diseño de moda en Parsons para ver si podía comenzar su propio negocio. También se ganó una beca de Teen Vogue, fue intern en Tommy Hilfiger y Peter Som, y lanzó su propia línea de blazers para mujeres hechos a la medida.

Maxey, quien aprendió por su cuenta a los ocho años, ahora dirige The Crated, un estudio de diseño e ingeniería que se enfoca en la moda y tecnología. Ella se aviva cuando discute los méritos de proyectos como prendas responsivas a los rayos UV y textiles hechos a través de impresión 3D. "Realmente disfruto el proceso de crear ropa, telas, y prendas de vestir. Comencé a coser desde temprano y amaba hacer mis propios patrones y su sentido de la geometría", señala Maxey. "Disfruto el proceso de hacer algo con mis manos, y trabajar en la programación y la impresión 3D, realmente hacer cosas –es una especie de subidón que obtienes a partir del proceso", nos cuenta con risas incluídas.

Los clientes de The Crated incluyen a North Face, Milk Studios y Google, quienes fondearon un vestido diseñado por Zac Posen y al que Maxey integró luces LED multicolores. Otro proyecto, Meld, fue una idea para un software que optimiza patrones de vestimentas, haciendo la producción más sostenible y menos demandante en su manufactura, especialmente en países con tendencias a talleres textiles con prácticas de explotación. Maxey eventualmente dejó Meld, pero sirvió como un ejemplo de sus ideas de cómo hacer que la industria textil sea más eficiente. "Todavía puedo trabajar en Meld, pero era un concepto, y me gusta jugar con los conceptos", señala.

Foto por Andrew Nunes

Maxey sigue trabajando en conceptos que llevan la industria de la moda hacia un campo más intuitivo. "Siento que ser un trailblazer se trata de querer seguir tus convicciones y crear un nuevo camino donde otras personas no pueden realmente verlo", asegura. "Otra cosa es ser capaz de admitir que estás mal o que cometiste un error cuando intentas una nueva idea y no haces un buen trabajo en ello. Hay un nivel de humildad que tiene que venir con la innovación, porque estás intentando hacer algo nuevo y probablemente lo arruines. Pero esa es parte de la diversión.

Click aquí para conocer más de The Crated.