¡Salvemos de la extinción al maíz palomero mexicano!

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¡Salvemos de la extinción al maíz palomero mexicano!

El maíz palomero mexicano podría desaparecer pronto, pero esta asociación está haciendo todo por rescatarlo.

Datos que probablemente sepas porque todos te lo han repetido desde la primaria:

UNO. El maíz es de origen mexicano. Es uno de los regalos de este país al mundo, junto con el chocolate, la cochinita pibil y Juan Gabriel. Cierto.

DOS. Todo el mundo come palomitas. Sobre todo en el cine. Hay de microondas, con queso, con chile, caramelizadas y un largo etcétera. Cierto.

TRES. Siempre habrá palomitas en el mundo. ¡Error! El maíz palomero mexicano, ancestro original de todos los maíces del mundo, está por desaparecer. Y eso podría significar el origen del fin.

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Acá te van algunos datos que no conoces pero que urge que todos conozcamos:

UNO. Los primeros maíces que el hombre logró domesticar fueron maíces palomeros, es decir, de grano duro. Esto fue hace unos 8 mil años. Y las primeras cerámicas no llegaron sino hasta hace 4 mil. Eso quiere decir que durante 4 mil años la única forma para cocinar maíz fue exponiendo los granos directamente en el fuego para que reventaran (aunque no había mantequilla, queso cheddar ni salsa Valentina).

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DOS. En México existen 59 razas de maíz, y sólo siete de ellas son palomeras: Toluqueño, Jalisco, Chihuahua, Nal-Tel, Chapalote, Reventador y Arrocillo. Casi ninguno de ellos llega a los cines: el 99 por ciento de las palomitas que comes vienen de maíces de Estados Unidos y Argentina.

TRES. Algunas de las especies de maíz palomero ya ni siquiera existían. Cuando la Organización Tortilla de Maíz Mexicano se propuso preservar estas especies del centro del país, no encontró a ni un solo productor que aún cultivara esas especies; tuvieron que recurrir a un banco de semillas (El CIMMYT: Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo) que con gusto aportó semillas que llevaban cerca de 70 años congeladas para que su proyecto pudiera arrancar.

El proyecto de Tortilla es comenzar a producir la variedad del Toluqueño en una parcela muestra y después convencer a productores de sembrarla y a nosotros de comprarla. No será fácil y por eso ya abrieron su campaña de Kickstarter.

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En tiempos que se adivinan oscuros, apoyar un alimento tan lleno de significados para nosotros como el maíz sería un acto político. Y qué mejor que apoyando el maíz palomero mexicano: Sí voy al cine a ver películas importadas de superhéroes güeros que toman Cocacola y hacen a America great again, pero mientras lo hago, como palomitas de maíz mexicano.